La sensación de estar sobrecargado y abrumado de trabajo es demasiado común. Las tareas se acumulan y el tiempo se siente escaso.
La clave no es tratar de crear más tiempo, sino dominar la autogestión para navegar por tu carga de trabajo de manera efectiva.
¿Qué es autogestión personal?
La noción de autogestión (definición) se refiere a la capacidad de moldear el propio desarrollo profesional y personal. Autogestión es, por lo tanto, llevar a cabo un proceso de aprendizaje independiente de las influencias externas. En un contexto de empresa tradicional, también significa un método de trabajo estructurado que ayuda a aumentar la productividad personal y sirve como acción preventiva frente a la presión del tiempo.
Autogestión: significado y definición
Las habilidades de autogestión se refieren a la voluntad de dirigir y dar forma responsable a la propia vida, tanto a nivel privado como profesional, de modo que la motivación, la capacidad de rendimiento y un equilibrio saludable entre el trabajo y la vida personal se mantengan a largo plazo.
En otras palabras, demuestras una noción de lo que es autogestión personal cuando tienes capacidad de acción, llevas a cabo un aprendizaje autodirigido y gestionas de forma proactiva tu negocio y tus rutinas diarias personales con una buena dosis de inteligencia emocional.
¿Por qué funcionan los métodos de autogestión?
Las estrategias efectivas de autogestión son un factor crucial de éxito para el rendimiento y la toma de decisiones en el trabajo. También son personalmente beneficiosos porque la autogestión significa estructura.
La estructura en la vida diaria evita el caos y brinda alivio. Los métodos de autogestión te ayudan a:
Planear de manera efectiva
Ser más organizado
Distinguir las tareas importantes de las que no lo son
Priorizar
Perseguir tus propios objetivos con más rigor
Experimentar menos estrés y presión de tiempo negativa
El objetivo de la autogestión es, en última instancia, encontrar una mejor estructura. Esto te da más tiempo para las tareas esenciales, ayuda a establecer objetivos y reduce la influencia de factores externos, brindándote así las absolutas facultades para manejar tu tiempo y prioridades.
Es importante destacar que esto no significa que debas programar cada segundo de tu día. Por el contrario, los periodos de flexibilidad son tan esenciales como los planificados. Las técnicas y ejemplos de autogestión pueden desempeñar un papel importante a la hora de influir de forma positiva en tu vida diaria profesional y privada.
Esto requiere cierto autocuidado y autoconciencia. Tener una noción de autogestión es crucial para el crecimiento personal y profesional. Ayuda a las personas a administrar su tiempo, tareas y emociones de manera efectiva. Sin embargo, si ves el desarrollo de tus habilidades de autogestión como parte de tu desarrollo personal, incluso puede ser agradable.
Técnicas de autogestión: Simplifica tu vida diaria
Una mejor autogestión puede simplificar tu vida diaria, aumentando tu productividad y satisfacción. El primer paso es aprender estrategias que te ayuden a alcanzar los objetivos establecidos a corto y largo plazo evitando la procrastinación.
Estos son algunos ejemplos de las mejores técnicas de autogestión que hemos recopilado para ti:
La Técnica Pomodoro te ayuda a aumentar la productividad alternando entre fases de trabajo y descansos. Divides tus tareas en segmentos y trabajas durante tres sesiones de 25 minutos cada una, con descansos de cinco minutos entre ellas. Después del cuarto intervalo, tómate un descanso de 30 minutos. Los temporizadores de escritorio basados en el navegador, como el temporizador Tomato, ayudan a mantener el tiempo.
El Método ABC se centra en la organización y la priorización. Primero, haz una lista de todas las tareas que tienes. A continuación, clasifícalas en tres grupos: las tareas A son muy importantes y deben manejarse de inmediato, las tareas B son menos críticas y se pueden programar o delegar y las tareas C son relativamente poco importantes y se pueden delegar o descartar.
La Matriz de Eisenhower clasifica todas las tareas según su importancia y urgencia y crea cuatro tipos de tareas: importantes y urgentes, importantes y menos urgentes, urgentes y no importantes, y ni urgentes ni importantes. Tu plan diario debe luego priorizar las tareas en consecuencia.
Organízate con Eficacia (GTD, por sus siglas en inglés), creado por el conocido autor estadounidense David Allen, enfatiza la recopilación de todas las tareas pendientes en la menor cantidad de sistemas posibles para aumentar la productividad. Las cuatro listas típicas incluyen una lista de acciones, una lista de proyectos, un calendario y una lista de revisión. Y recuerda, según este método, cualquier tarea que tome menos de dos minutos debe hacerse de inmediato.
Las listas de tareas son un clásico entre las técnicas de autogestión y forman la base de muchos otros métodos. Las habilidades modernas de gestión del tiempo deben incluir más: una columna de cosas “por hacer”, una columna “flexible” y una columna de qué “no hacer”, para todas las distracciones que pueden robar tu tiempo.
Los objetivos claros son una gran motivación. El método SMART te ayuda a evaluar, planificar y alcanzar tus objetivos de forma realista. El acrónimo significa Específico, Medible, Alcanzable, Realista y Temporal. Con el método SMART, estableces objetivos tangibles, te centras en métricas medibles y planificas para estar motivado, para seguir involucrado y mantener tus objetivos realistas.
El método ALPEN ayuda con la planificación diaria y consta de cinco pasos. Se procede letra por letra: A significa anotar las actividades, L significa estimar la duración de la tarea, P significa planificar tiempo de margen (realmente el 60 % para tareas espontáneas e interrupciones), E significa establecer prioridades de toma de decisiones y clasificarlas por importancia, y N significa revisar y registrar el éxito (¿qué has logrado?). Los elementos pendientes se programan para el día siguiente.
Tiempo y autogestión: Cómo ganar más tiempo
La gestión del tiempo y la autogestión están estrechamente relacionadas. Si no planificas y organizas bien tu jornada laboral, te faltará principalmente una cosa: tiempo.
No puedes controlar el tiempo, siempre pasa al mismo ritmo y un día invariablemente tiene 24 horas, es por esto que el término “gestión del tiempo” puede ser algo engañoso. Lo que realmente importa es lo que haces con tu tiempo.
La autogestión significa evolucionar la forma de trabajar. Varios métodos, técnicas y aplicaciones pueden ayudar a aumentar la productividad y controlar el estrés. Ganas lo que parece difícil de alcanzar: más tiempo.
Consideraciones finales: La autogestión es cada vez más importante
Para evitar sentirse abrumado en medio de reuniones consecutivas y agendas apretadas, es crucial encontrar estrategias que ayuden a mantener tu jornada laboral bajo control si deseas controlar la regulación emocional y el desarrollo humano y profesional.
Las técnicas y ejemplos de autogestión pueden ayudarte a satisfacer numerosas demandas de forma organizada, manteniendo el equilibrio entre tu vida laboral y personal bajo control. La mejor manera de averiguar qué métodos te convienen es probarlos.
Al adoptar prácticas efectivas de autogestión, puedes lograr avances significativos en la gestión de tus responsabilidades diarias de manera más eficiente, asegurándote de cumplir y superar los objetivos profesionales y personales.
A medida que mejores en la autogestión, es probable que encuentres tus días menos caóticos y más productivos, lo que te permitirá lograr un mejor bienestar.